En los últimos años, el sector cerámico está experimentando importantes avances tecnológicos que permiten la fabricación de productos con mayor calidad y a menor costo. Por ejemplo, se están utilizando tecnologías como la impresión digital para la decoración de productos cerámicos, lo que permite una mayor precisión y personalización.
Paralelamente a la idiosincrasia del sector, como la competencia de materiales alternativos, la demanda fluctuante del mercado y la necesidad de adaptarse a las nuevas tendencias y estilos de diseño, surgen otros nuevos desafíos importantes.
Uno de estos desafíos es la sostenibilidad ambiental. La fabricación de productos cerámicos requiere grandes cantidades de energía y agua, lo que puede tener un impacto significativo en el medio ambiente. Además, la eliminación de residuos y la gestión de emisiones también lo pueden ser. Por ello, muchas empresas del sector están implementando prácticas sostenibles y reduciendo su huella ambiental mediante el uso de tecnologías más eficientes y la optimización de sus procesos de producción.
Otro desafío importante es el aumento de los costos de materias primas. La mayoría de los materiales utilizados en la fabricación de productos cerámicos son de origen natural y pueden estar sujetos a fluctuaciones de precios en los mercados internacionales. La incertidumbre en los precios de las materias primas puede afectar significativamente la rentabilidad de las empresas cerámicas, por lo que es importante que estas empresas estén preparadas para hacer frente a dichas fluctuaciones y mantener su competitividad.
Por último, el sector cerámico también se enfrenta a la competencia de productos importados de otros países, que pueden ser fabricados a menor costo y con una calidad similar o incluso superior. Esto puede dificultar la rentabilidad de las empresas nacionales y la capacidad de competir en el mercado global.
Un sistema MES (Manufacturing Execution System) para la industria cerámica es una solución integral para mejorar la eficiencia y la calidad en la producción de cerámica. El sistema MES proporciona una visibilidad completa del proceso de producción y la capacidad de rastrear cada etapa del mismo, lo que permite una mejor gestión de la producción lo cual ayuda a mejorar la calidad del producto.
Funcionalidades:
- Automatización de la captura de datos de la planta
Esta funcionalidad permite a las empresas eliminar la necesidad de realizar capturas manuales de datos y automatizar todo el proceso de recopilación de información. De esta manera, se pueden obtener datos precisos y en tiempo real sobre la producción, la eficiencia, los tiempos de inactividad, el rendimiento y otros KPIs. Esto ayudará a las empresas a tomar las decisiones adecuadas.
2. Detección de paros e incidencias en tiempo real
Permite a las empresas identificar problemas en la producción de forma temprana y tomar medidas para solucionarlos de manera rápida y eficiente. En consecuencia, reducirá los tiempos de inactividad y mejorará la eficiencia en la planta.
3. Cálculo automático del OEE y KPIs
Los sistemas MES pueden calcular automáticamente el OEE y otros KPI importantes para la empresa, lo que proporciona una visión clara del rendimiento de la producción en tiempo real. Esto ayudará a las empresas a identificar áreas de mejora y a tomar decisiones basadas en datos para mejorar la eficiencia y la productividad.
4. Automatización de las órdenes de fabricación
Permite a las empresas planificar y programar la producción en tiempo real, lo que reduce los tiempos de inactividad, además, ofrece una mayor flexibilidad en la producción y la capacidad de responder rápidamente a los cambios en la demanda del mercado.
5. Digitalización de la documentación en planta
Elimina la necesidad de utilizar documentos en papel y permite un acceso más rápido a la información importante. Además, de esta manera se mejora la trazabilidad y la transparencia en la producción, lo que ayuda a las empresas a cumplir con requisitos de un Sistema de Gestión de Calidad.
En conclusión, un sistema MES aporta numerosos beneficios a la industria cerámica, permitiendo una gestión más eficiente y efectiva de los procesos de producción, control de calidad y mejora de la rentabilidad.